Sus gentiles manos, rebozantes de calor, rozaban con delicadeza su cabello. Él disfrutaba esa sensación, creyéndose amado, al menos unos segundos antes de despertar.
Cada vez que abía los ojos, comprobaba que nadie estaba a su lado.
Que no había una fuente de calor.
Que seguía solo.
Cuánto hacía que había soñado con sus translúcidas manos? Con aquellos finísimos dedos, con aquella delgada muñeca...Hacía mucho que su mente había tenido la misericordia de encerrar dentro de una gruesa burbuja todo aquello que le recordase la existencia de Antoiné. Y, sin embargo, helo aquí, nuevamente desesperado, nuevamente sumiso ante el dolor del recuerdo.
Un mes atrás, mientras deambulaba sin destino por Luxbel, buscando algún motivo de inspiración para la pintura de Madame Gëirgh, dio a parar a un parque. Una banca bajo un abeto, la nieve sobre ella, la oscuridad de una tarde de invierno. Cinco años de olvido se desbarrancaron, y todo afloró como si hubiese pasado ayer.
Las lágrimas tampoco pudieron ser contenidas.
Antoiné.
Qué hubiera sido de él sin su presencia? Seguramente sería el heredero perfecto que sus padres querían. Posiblemente ya tendría una familia, una carrera normal y exitosa.
Pero no es posible borrar el calor que dejó.
Antoiné.... Y entonces la inspiración regresa. Nacen los óleos más hermosos, llenos de sonrisas angelicales, de miradas transparentes, de sus ojos grises....
Y también aparecen los cuadros más terribles, los paisajes desolados, el vacío, la oscuridad, la tempestad de su alma.
Antoiné. Antoiné. Antoiné.
Dónde estaba?
Nunca me fui, querido. Tan sólo...tan sólo búscame un poco más, Chatteau.
Yo te amo.
Te amo....
De algún modo, el eco de las palabras pasadas de Antoiné continuaba resonando en sus oídos.
'Te amo'...
Y él aún lo creía.
will it continue? dont know, but this is just a dj from the whole story. For those who understand it.
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